La coeducación es el
camino más eficaz, transformador y
revolucionario para prevenir las desigualdades y la violencia de género.
Si queremos coeducar
hay que comenzar por…
¡Desaprender el sexismo
que de una manera u otra llevamos bajo la piel!
Y a partir de aquí iniciaremos el camino para…
- Cambiar la mirada a través del análisis crítico de las desigualdades de género.
- Construir nuevas formas de relación y organización libres de sexismo y violencia de género.
- Mostrar otras formas de ser y estar en el mundo alejadas de estereotipos sexistas.
- Crear nuevos referentes al margen del masculino hegemónico.
- Promover nuevas formas de jugar e invitar a niñas y a niños a crear y experimentar desde la igualdad.
- Visibilizar y valorar las aportaciones de las mujeres y las niñas en todas las áreas de conocimiento y en todos los tiempos.
- Integrar la educación emocional en la práctica docente para favorecer la construcción de identidades basadas en la autoestima, el respeto, la cooperación, la convivencia y la resolución pacífica de conflictos.
- Mostrar nuevos modelos a seguir más liberadores, diversos e igualitarios.
- Fomentar desde la infancia el respeto por el espacio personal y profesional para un reparto equitativo y corresponsable del tiempo y del trabajo doméstico y de cuidados.
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